miércoles, 15 de junio de 2011

Estúpida Sirenita...

De pequeña, solía ver películas Disney, sobre todo en la versión latina, que no se por qué tiene como más emoción...
Lo que tiene tener dos hermanitas pequeñas es que esta parte de mi infancia está condenada a ser revivida una y otra vez, por los siglos de los siglos, hasta que se hagan un poquito más mayores y llegue el Rebelde Way de su generación a la tele del salón de mi casa. Hoy, tras llegar a casa después de mi último examen de tercero -Radiología- pude comprobar con entusiasmo que tocaba "La Sirenita", y como de pequeña me encantaba, pues ahí que me acoplé a verla.
Y así fue como comprendí de donde derivan todos mis problemas actuales de autoestima con los hombres... Lo que sigue es una transcripción directa de la película:

Úrsula: Tu tendrás que haber logrado que el príncipe se enamore de tí, que te dé un beso; no uno cualquiera, sino un beso de amor verdadero. Si te besa antes del anochecer del tercer día, seguirás siendo humana para siempre, pero si no lo hace... ¡Me pertenecerás! ¿Aceptas querida?
Ariel:
Si me convierto en humana, ya no veré a mi padre ni a mis hermanas...

Úrsula:
Así es, pero tendrás a tu hombre. Es difícil decidir en la vida, ¿no crees? Además, hay otro pequeño detalle. No hemos hablado de cómo me pagarás... No se puede recibir sin dar nada a cambio...

Ariel: Pero yo no tengo nada...
U:
No es mucho lo que pido, sólo es una insignificancia... No lo extrañarás. Lo que quiero es... TU VOZ.
A: ¿Mi voz?
U:
¿Qué comes que adivinas? No hablarás, ni cantarás.
A: Pero sin mi voz, ¿Cómo hablaré?
U:
¡Eso no importa! Te ves muy bien. No olvides que tan sólo tu belleza es más que suficiente. Los hombres no te buscan si les hablas, no creo que los quieras aburrir. Allá arriba es preferido que las damas no conversen a no ser que no te quieras divertir. ¡Verás! Que no logras nada conversando, a menos que los pienses ahuyentar; admirada tu serás si callada siempre estás, ¡sujeta bien tu lengua y triunfarás! [...] Pobre alma en desgracia, ¡¿Qué haré por ti?! Si tu quieres ser feliz entonces tienes que pagar...


¿Hola? ¿Soy la única que piensa que la bruja es una manipuladora y que Ariel es tonta?? Pero vamos a ver alma de cántaro, si él te quiere, que te quiere, ¿para que le entregas tu voz, tu forma de comunicarte, y tu posibilidad de ver a tu familia, a una bruja que te convence de que las mujeres sólo tienen la función de ser bellas y adornar el fornido brazo de un apuesto caballero? Y si no te quiere, peor todavía, ¿por qué tienes que infravalorarte y apostarlo todo por un canalla? Pero lo grave, lo realmente grave, no es sólo que en la película la sirenita haga tal estupidez, sino que hasta ahora no me lo había planteado: millones de niños ven esta escena, y otras, una y otra vez, en la etapa de su vida en la que el cerebro tiene una mayor plasticidad. Encima, en el caso de algunos hombres que conozco, la bruja va y tiene hasta razón: sólo valoran a las mujeres por su belleza, y si son calladitas y sumisas ya lo ven de lujo. Y también algunas chicas, ojo. La cuestión es: Ariel, el príncipe Éric no es de esos, y te quiere precisamente por tu voz y por tu valor, por haberle salvado la vida arriesgando la tuya; no puedes darlo todo por un hombre, ¡ni por nadie! Y mucho menos abandonar así a las personas que más te quieren. Es que vamos... No se si me da tanta rabia porque he reconocido en mí misma o en algunas amigas esa actitud alguna vez...
Y hasta hace algunos añitos las chicas teníamos que ser así si queríamos casarnos; e incluso actualmente ocurre en muchas ocasiones. ¿Pues sabes qué? Preferiría quedarme a vestir santos, ¡Pero por lo menos hacerlo cantando y hablando de lo que me diera la real gana! Será posible...
Ala, ya me he quedado a gusto. Un abrazo a todos.

viernes, 10 de junio de 2011

Sorpresas enlatadas

¿Quién no querría controlar un poco más el tiempo en su vida? Retroceder cuando algo es muy bello, y revivirlo, o cuando algo nos hace mucho daño, y evitarlo. Volver a sentir la inocencia de un primer beso.

Pero, ¿y si así fuera? Si todo fuera bonito y maravilloso, sin lágrimas de dolor y sin sorpresas al final del día, ¿valdría la pena? Imagínate, hasta el momento más dulce sabría rancio y enlatado. Si nos paramos a pensarlo friamente, lo que más nos hace avanzar, madurar y nos da fuerza y empuje son presisamente esos momentos que más nos duele recordar. Porque tras años de caídas, he llegado a dos conclusiones: que la mayoría de las veces me he tirado al suelo yo solita, y que lo que más me pudo honrar fue levantarme. En fin: superarse y crecer ante las adversidades.

Date las oportunidades que necesites y no te castigues por cometer errores o por malgastar el tiempo, y aprende todo lo que puedas. Y sobre todo, mucho menos dejes que nadie te juzgue. Si alguien te hace daño, tengo comprobado que sonreir es el mejor antídoto que existe contra los egos exaltados.

Porque al final no existe nadie malo, solo existen las personalidades poco cultivadas, pero con tiempo y lágrimas a todos se nos bajan los humos y se nos crecen los fuegos (xD).

Pues eso, blogo-amigo, exhibe tus heridas de guerra como tus mejores trofeos, y confía en tí porque hagas lo que hagas es algo importante que te llevará a alguna parte. Si no, que alguien me lo explique porque no le encuentro sentido a esta vida... Una cosa más, ¡he vuelto a escribir en voz baja esas cosas que nunca te dije pero quería que lo supieras! Paz y amor ^^